Hacer una boda en Francia es el sueño de muchos fotógrafos de boda, yo he podido disfrutar de ese privilegio y la verdad es que me encantaría repetir.
La boda en Francia de Mariana y Brandon, mas que una boda fue una celebración del amor con todos sus familiares y amigos. Nueva york (que es donde viven los novios), Colombia (que es de donde es la novia), Inglaterra (es de donde es el novio) de todos esos puntos llegaron familiares y amigos hasta Gabat un pequeño pueblo del pais vasco frances donde Brandon posee una casa, para disfrutar de tres días de fiesta y de la boda que los novios habían planeado con mucho mimo.
El primero de ellos lo pasamos entre Pau y Eaux-Bonnes un precioso pueblo de los prineos atlánticos, en Pau los invitados fueron al mercado provistos de una cestas de mimbres regalo de los novios, para que compraran la comida que luego disfrutarían en el picnic. Tengo que decir que a mi el mercado de Pau me encantó! la verdad es que aluciné con la cantidad de tipos de quesos que había y también con el foie.
Cuando llegaron a Eaux-Bonnes en autobus, los invitados se encontraron con todo preparado para disfrutar de un magnífico día de picnic, las risas y el buen ambiente estuvieron presente todo el día a pesar del día de frío y de una leve llovizna, pero hasta sombrillas para eso llevaban los novios que habían pensado en todo.
El segundo día fue el de la boda, desde primeras horas de la mañana la casa era un hervidero de familiares y amigos preparando lo que sería el gran día, porque además esta boda fue muy hand made, los novios y sus familiares se encargaron de la decoración e incluso también de parte de la comida. La verdad es que fue muy bonito vivir ese ambiente de preparativos y nervios antes de la ceremonia.
La ceremonia tuvo lugar en un sitio muy especial de la casa, un pasillo de chopos con una árboleda al final plantados por el novio cuando era niño sirvió de escenario, no me digais que no es emotivo y especial, eh?. El maestro de ceremonias fue un vecino-amigo de Brandon de toda la vida, lo que hizo que fuera aún mas especial, también algunos familiares y amigos les dedicaron unas palabras, aunque el momentazo fue cuando Brandon le puso a Mariana el anillo que el mismo había diseñado en el dedo y cuando Mariana le correspondio con un libro.
Depúes de la ceremonia, besos y abrazos y también un momento para dejar escrito algunos lineas para el nuevo matrimonio en el árbol de los deseos. Y llego el momento de disfrutar de auténtica comida del pais vasco frances, aunque también con un toque Colombiano, el champangne, los quesos, el foie y también un guiso de cordero exquisito fueron los protagonistas de la cena, eso y las risas y la alegría de todos los que compartieron este día con Mariana y Brandon.
La fiesta terminó como no podía ser de otra manera con los novios y todos los invitados quemando la pista de baile.
El tercer día de la boda nos llevo hasta San Juan de Luz, un precioso pueblecito casi pegado a Biarritz, para disfrutar de la última comida y despedirnos de Mariana y Brandon, dándole las gracias por lo bien que lo habiamos pasado con ellos.
Como habéis visto hacer una boda en Francia fue una experiencia increible que pude disfrutar gracias a mi compañero Pedro Bellido, gracias Pedro por llevarme contigo.